Para muchos, cepillarse los dientes es un mero trámite, un acto que realizan de forma mecánica después de comer o antes de acostarse sin siquiera pensar en los movimientos que hacen; como escribir, caminar, respirar o parpadear. Pero, en ocasiones, es necesario desconectar el piloto automático y pensar en nuestra rutina de higiene bucodental. ¿Realmente te cepillas bien los dientes?
Aprendemos a cepillarnos de pequeños y nuestra técnica no variará demasiado conforme crecemos. Por eso, hoy te traemos una checklist para que compruebes si realmente tu rutina de cepillado es la correcta, o debes cambiar algo para conseguir que tus dientes y encías se mantengan en salud, y que tu sonrisa se conserve en buen estado. ¡Echa un vistazo!
Recomendaciones para una buena higiene oral: ¿cuántas de estas afirmaciones cumples?
- “Me cepillo los dientes todos los días, al menos dos veces al día; después de cada comida y antes de irme a dormir.”
- “Invierto aproximadamente dos minutos en cepillar mis dientes de forma pausada para intentar que no quede ningún rincón sin repasar.”
- “Me echo la cantidad justa de dentífrico; no malgasto el bote, con una cantidad equivalente a un grano de arroz es suficiente. Me fijo en las propiedades de las pastas de dientes para elegir la que mejor puede ayudarme a cuidar mi boca.”
- “Me cepillo con suavidad para no dañar el esmalte dental. Si veo que mis encías sangran, acudo al dentista para comprobar qué está ocurriendo.”
- “Tras cepillarme no me enjuago repetidas veces, sino que me enjuago poco y con suavidad y dejo que el dentífrico actúe sobre mis dientes.”
- “Complemento el cepillado con cepillos interdentales o enjuagues bucales. No utilizo el colutorio como sustituto del cepillado dental.”
- “Cambio mi cepillo de dientes cada tres meses de uso diario. Escojo mi cepillo nuevo según mis necesidades (cerdas más duras o más blandas, eléctrico vs. manual…).”
- “Acudo al dentista al menos una vez al año para realizarme una limpieza dental profesional y una revisión de mi salud dental.”
Otros consejos para cuidar tus dientes
Hay una serie de bebidas y alimentos que, por su composición, pueden deteriorar el esmalte de nuestros dientes. No se trata de dejar de consumir radicalmente estos productos, sino de tenerlo en consideración para no abusar de ellos y no olvidar cepillar nuestros dientes cuando los tomemos.
- El té y el café, así como el vino tinto, tienen una alta concentración de cromógenos. Estas sustancias se adhieren a la superficie del diente y provocan la decoloración progresiva del esmalte con facilidad.
- Los refrescos y las bebidas carbonatadas o azucaradas suelen contener ácidos que pueden dañar el esmalte y contribuir a la aparición de caries. En general, limitar el consumo de azúcar siempre supondrá un beneficio para tu salud dental.
- Salsas oscuras, especias y frutas de colores intensos, etc. Incluyen componentes que también pigmentan y estropean nuestras piezas dentales.
Para prevenir que tus dientes se estropeen también es recomendable evitar el tabaco, que además de dañar nuestra salud general también contribuye a la aparición de diversas patologías dañinas para nuestra salud oral, así como intentar no morderse las uñas y no utilizar los dientes para abrir envases. Consulta este post sobre hábitos del día a día que estropean nuestros dientes para saber con qué otras costumbres debes tener cuidado.
Revisa tu salud dental en nuestra clínica. Hay manchas del esmalte que pueden eliminarse con una sencilla limpieza dental y así de paso podremos revisar y controlar tus dientes y encías. ¡Te esperamos en el centro de Zaragoza!
